Diario La Discución.La intercomuna y sus habitantes necesitan un sistema integrado de transporte en que la bicicleta sea un medio formal y su uso se sume a un conjunto de medidas imprescindibles y respecto de las cuales hasta ahora se ha hecho muy poco.
En el marco del Plan Maestro de Transporte que se prepara para la intercomuna debería realizarse una nueva encuesta que determinará cuánto ha aumentado el uso de la bicicleta y debería servir para orientar los proyectos de habilitación de ciclovías y mejorar la coordinación entre las ya existentes. Es de esperar que también incorpore consultas acerca de la satisfacción de los usuarios con la infraestructura existente y la relación con otros medios de transporte y sus usuarios. Entre los ciclistas es común la queja sobre la falta de cultura y respeto de peatones y automovilistas y las complicaciones que producen el mal estado de algunas ciclovías y lo fragmentado que es la red.
Desde el punto de vista de los servicios públicos y la mantención, resulta conveniente definir a quién le corresponde, ya que al estar asociadas a las arterias estructurantes, hay algunas que dependen del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y otras de Obras Públicas, de modo que se corre el riesgo de que la responsabilidad se diluya. Además, sería conveniente establecer estándares de calidad obligatorios, privilegiando el asfalto y el hormigón pigmentado, que han demostrado ser los mejores materiales.
Casos paradigmáticos de cultura ciclista son las ciudades de Barcelona, Sevilla, Viena y Copenhague, esta última un símbolo de cómo hacer de este medio de transporte un actor estratégico del tránsito y el transporte urbano. Además, la experiencia comparada permite apreciar que en materia de seguridad, a mayor cantidad de bicicletas, baja la siniestralidad vial, lo mismo que los niveles de contaminación acústica y del aire. Además, en todas las ciudades citadas se ha podido determinar una significativa incidencia de esta política pública de transporte en la prevención de enfermedades relacionadas con el sedentarismo, en especial las cardiovasculares.
En el Consejo Regional se encuentran cinco proyectos presentados por el municipio de Chillán, con una inversión total que alcanzaría más de mil millones pesos. Considera ciclovías en la Avenida Ecuador, entre Brasil y Argentina; y la que se extendería por Sepúlveda Bustos, entre las calles Atacama y Martín Ruiz de Gamboa. Otra es la que se construiría en la Avenida Libertad, desde O’Higgins hasta Argentina, una tercera, entre La Castilla y Maipón, que se encuentra en el mismo proyecto que la emplazada en la calle Arturo Prat, entre Brasil y 5 de Abril. También existe un diseño que incluye a Alonso de Ercilla, entre Huambalí y Los Puelches; y en Barros Arana, entre Variante Collín y Alonso de Ercilla.La intercomuna y sus habitantes necesitan un sistema integrado de transporte en que la bicicleta sea un medio formal y su uso se sume a un conjunto de medidas imprescindibles sobre las que es necesario trabajar decididamente, ya que hasta ahora se ha hecho muy poco. Estas acciones tienen que ver con la racionalización del uso individual del automóvil, el ordenamiento general del tránsito, el mejoramiento de la infraestructura vial y del transporte público, el control de los niveles de emisión, y no menos importante, la interacción con la comunidad.
No contaminemos el ambiente, descongestionemos las calles,ahorremos y optemos por una vida más sana. Si existen los recursos para sacar árboles de las avenidas, ¿Por qué no también para hacer nuevas ciclovías?.
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lunes, 24 de septiembre de 2012
Más ciclovías para Chillán.
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